El Malawach es versátil, ideal para desayunos, almuerzos o meriendas. Con pocos ingredientes y una cuidadosa preparación, su textura suave y sabor único lo convierten en un deleite que sacia el apetito con cada bocado. Ideal para compartir en familia o con amigos.
La preparación del Malawach requiere paciencia y precisión en cada paso.
Al mezclar los ingredientes se forma una masa suave que necesita reposar para adquirir la textura perfecta.
Estirarla con delicadeza y freírla con mantequilla son los secretos para disfrutar de este delicioso platillo.
Ingredientes
500 gramos de Harina
300 mililitros de Agua templada
60 gramos de Mantequilla o margarina derretida
Semillas de sésamo negro
1 pizca de Sal
Preparación
Paso 1 : La preparación comienza mezclando la harina, el agua y la sal hasta obtener una masa suave, amasando por 15 minutos.
Paso 2 : Después, se vuelve a amasar por otros 15 minutos hasta lograr una masa perfecta y homogénea.
Paso 3 : Divide la masa en 4 partes y forma bolas suaves, untándolas con mantequilla y dejándolas reposar por 45 minutos.
Paso 4 : Extiende cada bola de masa con cuidado hasta obtener láminas delgadas.
Paso 5 : Unta mantequilla derretida en ambos lados, dobla la masa y haz un nudo para mejorar su textura.
Paso 6 : Cubre y deja reposar por otros 45 minutos.
Paso 7 : Extiende nuevamente la masa y recorta con un molde redondo.
Paso 8 : En una sartén caliente, fríe cada malawah unos minutos por cada lado a fuego medio.
Paso 9 : Espolvorea con semillas de sésamo negro al gusto y sirve.